

Te depilas, sientes tu piel libre de vello y te sientes increíble , pero a los pocos días el vello vuelve aparecer, tu piel se ve reseca e incluso irritada… no estás sola. Muchas veces, sin darnos cuenta, cometemos pequeños errores en nuestra depilación que sabotean todo el esfuerzo que ponemos en nuestra rutina.
Y no, no necesariamente tiene que ver con tu tipo de piel o que “no te funciona la depilación”. A veces el problema está en los pequeños detalles: no preparar bien tu piel, usar productos de baja calidad o no tener constancia.
En este artículo te contamos los 5 errores más comunes al depilarte , te explicamos por qué están afectando tus resultados, y, lo más importante, cómo solucionarlos para que logres esa piel suave, cuidada y libre de vello por más tiempo.
A veces creemos que depilarnos es tan simple como aplicar el producto (ya sea cera, rastrillo o ipl) y listo. Y si bien suena algo tentador, la realidad es que hay muchos detalles que marcan la diferencia entre una piel suave y sana y una llena de irritaciones, vellos encarnados o resultados que no duran nada. A continuación, te presentamos los errores más comunes que, sin darte cuenta, podrían estar saboteando todo tu esfuerzo.
El error más común en la depilación, independientemente del método que elijas, es no preparar correctamente la piel. Este paso es de suma relevancia, pues es crucial para proteger la piel de posibles irritaciones, vellos encarnados y facilitar una depilación mucho más efectiva.
Para preparar tu piel, es necesario exfoliarla 24 horas antes del depilado. De esta forma, se eliminarán las células muertas y se ayudará a liberar vellos encarnados que pueden llevar a los molestos vellos enterrados.
Además de exfoliar, es necesario hidratar 1 día antes, pues en caso de llegar con la piel deshidratada te expones a microlesiones que pueden llegar a afectar la salud de tu piel. Es por ello que debes utilizar cremas hidratantes para humectar tu piel y llegar lista para tu depilación.
Si tu método es la depilación IPL, recuerda que es necesario rasurar la piel para que la luz pueda llegar directamente al vello y que pueda debilitarlo.
Para el día de la depilación, no olvides llegar con tu piel limpia, libre de perfumes o desodorantes. Esto se debe a que, aunque pueda crear una sensación de limpieza, este tipo de productos pueden obstruir el poro, causar irritaciones e incluso interferir con el tratamiento.
¿Has escuchado la frase lo barato sale caro? No hay nada más cierto, y más hablando de productos que van directamente en tu piel. Cada método de depilación es distinto, pero en todos debes de buscar productos de calidad que no pongan en riesgo la salud de tu piel.
Por ejemplo, si bien la cera es uno de los métodos más dolorosos, una cera de mala calidad o mal manipulada puede provocar quemaduras, irritaciones severas o incluso infecciones. Elige siempre opciones que estén formuladas para tu tipo de piel y respeta la temperatura y el tiempo de aplicación.
Por otro lado, si utilizas o estás buscando una depiladora de Luz Intensa Pulsada, busca aquellas que cuenten con certificaciones, materiales de calidad y atención personalizada. De lo contrario, puedes llegar a exponer tu piel a procedimientos inseguros y dolorosos, que fácilmente se pueden evitar si desde el principio eliges una de calidad comprobada.
Recuerda: tu piel merece lo mejor, y eso también aplica a los productos con los que decides cuidarla.
Te invitan a cenar, te pones ese vestido que tanto te gusta y ¡PUM! Te das cuenta que no te has depilado las piernas en un buen rato. Procedes a tomar el rastrillo y rasurar de la manera más rápida que puedes. Y si bien, en el momento pareció una “buena solución”, pasado los días te das cuenta de toda la irritación que causó, los vellos encarnados y la molestia que esto trae a tu piel.
Es por ello que es de suma importancia crear hábitos de depilación que se adapten a tu vida cotidiana, pero que sean respetuosos con tu piel. Depilarte en días erráticos, ya sea con el vello demasiado corto o demasiado largo, puede arruinar los resultados.
Si tu depilación la haces con cera, lo ideal es dejarlo crecer a una altura uniforme (aproximadamente 6mm) para que ésta pueda agarrar el vello desde la raíz.
Por otra parte, si tu depilación es con IPL, recuerda siempre rasurar antes de pasar la depiladora y que la constancia es la clave.
Ya preparaste tu piel, depilaste y crees que con ello ya estás lista para triunfar. ¡Casi, pero no! Los cuidados post-depilación son casi igual de importantes como la depilación misma. Aunque el proceso de depilar ya terminó, la piel ha quedado más sensible, expuesta y propensa a irritarse (especialmente si se usó cera caliente).
Por ello mismo, es que después de depilar debes seguir estas recomendaciones:
Estos cuidados post-depilación no solo ayudan a prevenir molestias y protegen tu piel, sino que también prolongan los resultados de la depilación y hacen que tu piel luzca más pareja, suave y luminosa.
No todas las pieles (y vellos) son iguales. Actualmente, ya tenemos muy presente esa frase: bloqueadores, mascarillas, hasta maquillajes especiales para cada tipo de piel. ¡Está perfecto! Pero el problema está en que no la consideramos realmente en los métodos de depilación.
Es por ello que usar cualquier método de depilación sin tomar en cuenta el tipo de piel y el tipo de vello es uno de los errores más comunes de depilación. Necesitamos entender que no todas las técnicas funcionan igual para todas. Lo que le va bien a tu mejor amiga, puede que a ti te cause irritación.
Por ejemplo, las pieles sensibles o secas, el usar rastrillo, cera caliente o cremas depilatorias pueden causar enrojecimiento, irritación e incluso ardor constante. O las pieles con tendencia a vellos encarnados, deben evitar técnicas que arranquen el vello desde la raíz sin exfoliación previa (como pinzas o cera), ya que esto solo agrava el problema.
¿Qué puedes hacer? Antes de la elegir un método de depilación, debes:
Es importante mencionar que si estás en tratamiento hormonal o tienes condiciones dermatológicas, debes consultar a tu especialista.
Usar el método adecuado para ti no solo mejora los resultados, sino que protege tu piel a largo plazo y evita molestias innecesarias.
Ya sabes lo que debes evitar para lograr tener una mejor depilación, pero aquí te compartimos algunos consejos que te ayudarán a llevar tu rutina de depilación a otro nivel para que tu piel luzca suave, radiante pero sobre todo sana y el vello vuelva más fino y lento.
Independientemente del método que utilices, una buena técnica marca la diferencia. Te compartimos algunos tips para mejorar tu técnica de depilación:
Aplícala en la dirección del crecimiento del vello y retírala con un tirón firme en sentido contrario y lo más paralelo posible a la piel.
Escoge el cabezal correcto para cada zona de cuerpo (si tu rasuradora lo tiene), rasura siempre en dirección del crecimiento del vello y no presiones fuerte..
Escoge rastrillos de alta calidad, de 2 navajas, rasura en sentido del crecimiento del vello.
Escoge la potencia adecuada para tu piel, sé constante, utiliza productos potencializadores.
No todos los métodos funcionan igual para todas, por ello, te presentamos esta tabla con ventajas y desventajas de los métodos de depilación más populares.
La constancia y los buenos hábitos son la clave para ver resultados prolongados. No solo se trata de depilar cada cierto tiempo y ya, en realidad va más allá de eso: es toda una rutina que se tiene que seguir con constancia y dedicación:
Si quieres conocer más acerca de la rutina perfecta para tu depilación, da click aquí.
La depilación no debería sentirse como un castigo… pero si estás cometiendo alguno de estos errores, es probable que los resultados no estén siendo los que esperas.
No preparar de marca correcta tu piel, usar productos de baja calidad, ser inconstante o saltarte los cuidados post-depilación son hábitos más comunes de los que imaginas. ¡No te juzgamos! A todas nos ha pasado. ¡Pero no te preocupes! La buena noticia es que todos tienen solución. Con pequeños cambios en tu técnica y una rutina constante, puedes lograr una depilación que haga que tu piel se vea suave, sin vello, pero sobre todo, sana.
Recuerda, no solo se trata de eliminar el vello, sino de cuidar y respetar tu piel en el proceso.
En ShinnySkin, creemos que depilarte debe sentirse como una decisión libre, segura y bien acompañada. Por eso estamos aquí: para ayudarte a que cada paso en tu rutina te acerque más a sentirte cómoda en tu piel.
Para las depiladoras IPL, lo ideal es comenzar con 1 o 2 sesiones las primeras semanas, para después irlo espaciando conforme el vello se vaya reduciendo.
Lo mejor es prevenir exfoliando tu piel antes de depilar, pero si ya están ahí, aplica tónicos post-depilación para ayudar a revitalizar tu piel.
Antes, puesto que de hacerlo después se corre el riesgo de lesionar la piel.
La depilación IPL, ya que reduce el vello con el tiempo y evita irritaciones constantes, aunque se recomienda probar con niveles bajos y hacer prueba de sensibilidad antes.